En alguna ocasión hemos notado que coincidimos con la misma persona repetidamente en un mismo día. Lo más seguro es que sea una mera coincidencia, pero, ¿cómo saber que no es nada más?
Si tenemos sospechas, necesitaremos averiguar si estamos siendo investigados por un detective o si realmente se trata de un acosador.
Lo primero y más importante, es mantener la calma. A continuación, debemos asegurarnos de si nos están siguiendo o no. Para comprobarlo podemos acelerar el paso y comprobar si esa persona también lo hace, cruzar la calle y ver si nos copia, pararnos para intentar que nos adelante e ir en otra dirección…
La opción más rápida y eficaz para intentar salir de esta situación es entrar en un lugar concurrido para mayor seguridad: supermercados, cafeterías, tiendas…
Además, si vamos en dirección a nuestra vivienda/trabajo/escuela, etc., es fundamental cambiar de rumbo y confirmar que no estamos siendo perseguidos antes de llegar al destino. De esta manera evitamos que conozcan información privada sobre nosotros.
A su vez, en esos momentos es vital no entrar en callejones, calles oscuras o zonas de la ciudad donde podamos correr peligro.
Los Cuerpos de Seguridad del Estado siempre están dispuestos a ayudar a los ciudadanos. Si nos encontramos en una situación de peligro, debemos acudir a ellos inmediatamente.
Siempre tenemos que estar alerta ante cualquier situación poco común. Nuestra seguridad es lo primordial.